Me imagino estando juntos y... rayos, que lindo y que doloroso es a la vez.

Las ganas de que te quedes sabiendo que no eres para mí, no las pierdo nunca. Peleo conmigo,  con mi insomnio y con la necesidad de buscarte sabiendo que no puedes quedarte.

Peleo con el afán de olvidarme de la vida tal y como la conozco, sino te tengo en ella, me aferro a mi apatía sumergida en memorias tristes desde que no estás.
Albergo la idea de que ese odio efímero que aveces se asoma, se quede a  vivir permanentemente en mí, Pero,  que ese afán de olvidarte me obsesiona y me hace seguir enamorada de ti con ese yo absurdo que sigue quedándose donde le hacen daño.

Tengo dos personas peleando todo el tiempo en toda la extensión de mi ser, una de ellas quiere despedirse de tu sombra y la otra quiere pegársela en los tobillos, una de ellas prefiere morir contigo a vivir sin ti, la otra está decidida a continuar sin tu compañía, aunque se marchite mi alma. Yo estoy en el intermedio de una lucha continua de dos personalidades que se resisten a ceder. En un lado está la cruel que te ama y  en el otro, la que sueña olvidarte con  los suicidas puntos suspensivos que inventan otro comienzo cuando creo que ya todo ha concluido, a tal punto, que el desear mi olvido,  se ha convertido, en mi pasatiempo favorito.
Por qué no puedo dejar de extrañarte tanto?... Es asombroso cuántas cosas no te he dicho a pesar de que hablamos sin parar. Es imposible no querer darte un beso cada vez que sonríes.
Si quieres, nos vemos por ahí a darnos besos a escondidas, o a correr de la mano gritando al mundo cuanto nos queremos, y si llueve nos abrazamos y dejamos que la lluvia nos diga que juntos somos esa rareza perfecta, que se parece tanto al amor.

 

Escrito realizado por la joven:
 Valeria Granada Rodas,  del grado 11*A (Músico, compositora y escritora.)

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